Si te gusta practicar deporte seguro que ya sabes lo importante que es la alimentación para lograr tus objetivos. Deberás seguir una dieta saludable y comer algo antes de entrenar, pero, ¿sabes qué alimentos debemos tomar para obtener esta energía?
Los frutos secos son beneficiosos para cualquier persona –salvo que sea alérgica a ellos o los tenga prohibidos por prescripción médica–, pero de forma especial para las personas que realizan deporte.
Poseen una gran cantidad de proteínas, hidratos de carbono, fibra y ayudan a combatir el colesterol y las enfermedades cardiovasculares, por lo que resultan idóneos para practicar deporte, pero hay que saber cuáles son los más recomendables y cómo es mejor tomarlos.
¿Por qué son recomendables?
Cuatro razones principales:
- Son ricos en grasas saludables, por lo que aportan al deportista una gran fuente de energía, necesaria para someter a su cuerpo a un esfuerzo físico importante.
- Son una enorme fuente de hidratos de carbono, los cuales se transforman en glucosa, muy importante para el correcto funcionamiento de los músculos.
- Tienen un contenido importante en proteínas, encargadas de mantener la estructura muscular.
- Además de todo esto, los frutos secos también contienen vitaminas y minerales imprescindibles para mantener el nivel de electrolitos adecuados en tu organismo.
¿Cuáles son los mejores para deportistas?
- Las almendras: Son ricas en proteínas, antioxidantes y minerales como el calcio, potasio, fósforo, selenio y hierro. También ayudan a fortalecer los huesos, relajar los músculos y proporcionan un mejor descanso.
- Las nueces: Son un superalimento ideal para mantenerse en forma. También son fuente de fósforo, un reconstituyente nervioso que te ayuda a recuperarte tras un ejercicio físico intenso. Contribuyen a mejorar el tránsito intestinal y el sueño.
- Las avellanas: Son buenas para retrasar la fatiga muscular. También aportan hierro, magnesio, manganeso y fibra. Son todo un reconstituyente después de una dura sesión de entrenamiento.
- Los piñones: Contienen una gran cantidad de hierro y son los frutos secos más ricos en proteínas, por lo que resultan muy recomendables para deportistas que tengan un gran gasto energético.
Es cierto que los frutos secos nos aportan mucha menos agua que las frutas y que son muy calóricos, pero son ricos en grasas saludables y proteínas, por lo que comer un puñado de ellos, mucho mejor crudos que tostados o fritos, antes de entrenar nos dará energía para evitar la fatiga y el cansancio.
¿Te hacen falta más razones para incluirlos en tus sesiones de entrenamiento? 😉