A veces, el conciliar el trabajo con una alimentación saludable y equilibrada se te puede hacer cuesta arriba por la falta de tiempo o la comodidad de tener a mano platos preparados.
Por eso te traemos unos consejos, para que puedas llevar la alimentación deseada y que los apliques de forma regular a tu día a día.
Si debes mejorar la alimentación en el trabajo, una buena opción por la empezar, es cocinar los fines de semana, que, por lo general, se cuenta con más tiempo libre, y así aprovechar para dejar la comida preparada y evitar el tener que cocinar al llegar del trabajo.
Para que la comida que lleves al trabajo sea saludable, deberá contener al menos una parte de verduras y fruta, dando espacio también a las proteínas. No debes olvidarte de tomar el agua necesaria a la vez que café o té, y eliminar o reducir lo máximo posible las bebidas azucaradas como refrescos y zumos.
Trata de que la comida que te lleves ayude al rendimiento en el trabajo, como puede ser el caso de los arándanos, salmón o aguacate, que son buenos para la memoria y la concentración.
Las legumbres también son una gran elección de comida saludable que no deberías olvidar, y acompañarla al gusto, con los nutrientes adecuados para hacer una comida equilibrada dentro de lo saludable.
Las ensaladas son un plato sencillo, saludable y se puede variar con cualquier alimento
Las ensaladas siempre son un buen aliado
Las ensaladas son otra opción a la que no te podrás resistir, fáciles, cómodas y perfectamente saludables para cualquier persona. Para las ensaladas, frescas y de rápida preparación, lo mejor será que utilices un recipiente de vidrio para que los alimentos se mantengan en mejor estado y aguanten más.
Puedes optar por tomate, atún, lechuga, espárragos, quinoa, trocitos de queso fresco y nueces troceadas para hacerte una ensalada apetecible y saludable. Para que lo aliñes al gusto llévate aparte aceite de oliva virgen extra, vinagre, sal, pimienta o lo que más te guste, para echarlo justo antes de comer.
Hay que dar espacio a la comida
Para una alimentación saludable, no solo se trata de los alimentos que vayas a ingerir, sino también el tiempo dedicado a la comida.
Muchos profesionales recomiendan que se dedique al menos 20 minutos para masticar despacio y bien. Además es recomendable cambiar el espacio para comer y no hacerlo en el mismo escritorio en el que llevas toda la mañana, para separar los momentos, disfrutar y aprovechar el momento de la comida, separándolo lo máximo posible del trabajo.
Comer a conciencia y sin prisa puede hacer a las personas perder peso y no engordar
Es muy probable que tras ver esto hayas querido replantear tu alimentación o integrar nuevos hábitos para tu día a día en el trabajo. Y ya sabes, si tienes dudas, acude a un profesional para que te aconseje sobre qué alimentos te vendrían mejor.
¡Ah! No dudes en contarnos cuál es el plato por el que vas a comenzar esta nueva etapa de alimentación en el trabajo.