¿Infusiones? ¡Sí, gracias!

Si no quieres tomar cafeína ni teína, una infusión natural será tu mejor opción. Si nos acostumbramos a tomarlas más a menudo estaremos más protegidos contra resfriados y catarros. Además, hay tantos tipos de infusiones como tú quieras probar. Te enseñamos algunas infusiones naturales. Añade a lista de la compra jengibre, cúrcuma y regaliz y listos para preparar infusiones en casa.

Infusión de jengibre: la mejor prevención

 

La raíz del jengibre es la mejor aliada para prevenir catarros y resfriados. No solo se utiliza en la cocina, en la medicina tradicional de países asiáticos tiene un gran protagonismo. Sus propiedades son numerosas y si ya has pillado un resfriado es mano de santo. Tiene vitamina C y propiedades antiinflamatorias y analgésicas.

infusiones caseras

Para preparar la infusión en casa ralla una pizca de raíz de jengibre. Hiérvela en agua durante cinco minutos con cáscara de limón. Deja reposar, cuela el resultado y lista para degustar. La combinación con el limón hace que los resultados sobre nuestro organismo tengan más eficacia. Puedes añadir unas gotas de zumo de limón cuando la vayas a tomar.

Infusión de regaliz: dulce y digestiva

 

El regaliz es bueno para el aparato digestivo y respiratorio. Si está rico en gominola pruébalo en infusión. También conocido como paloduz, ayuda a combatir los gases y la hinchazón abdominal.

Para preparar una infusión de regaliz pela el paloduz y parte unos trocitos. Añade cardamomo, canela, menta y anís estrellado. Hierve durante cinco minutos y deja reposar otros diez. Toma una taza después de la comida y acaba con un sabor muy dulce a la vez que natural.

Infusión de cúrcuma y leche: ideal para merendar

 

infusiones caseras

Al igual que el jengibre, la cúrcuma tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que ayudan a fortalecer nuestro sistema inmunológico. Es muy buena en la prevención y cura de resfriados. También es una especia muy recomendable para persona asmáticas.

A esta infusión le añadiremos leche para que sea más fácil de combinar con unas pastas o unas galletas. Pon agua a hervir y añade una cucharadita de cúrcuma, otra de canela y hierve cinco minutos. Como con el resto, deja reposar. Cuando vayas a servirla añade un poco de leche caliente o bebida de coco y una cucharada de miel.

Hay tantas infusiones como especias y plantas tengas en tu cocina. Usa tu imaginación y añade una infusión a tu día a día para fortalecer tu sistema inmunológico.