Cuida tu piel después del sol: mascarilla facial casera

¿A quién no le sienta bien un poco de color después de unos días tomando el sol? El rostro adquiere un tono veraniego y la ropa de colores luce mejor. Para conseguir el bronceado perfecto hay que tener mucho cuidado antes, durante y después de la exposición solar.  Prepara una mascarilla casera para lucir un rostro bronceado y reluciente.

Mascarilla casera con dos ingredientes:

 

Tras tomar el sol, nuestra piel pierde elasticidad. Ayuda a que tu piel se regenere cuanto antes. Con tan solo dos ingredientes, un yogur natural y miel, lo tendrás todo listo para el cuidado de tu piel. El yogur tiene ácido láctico y zinc, muy efectivos para aliviar el enrojecimiento que se produce con la exposición al sol.

mascarilla facial casera después del sol

En un cuenco mezcla un yogur natural y sin azúcar con una cuchara sopera de miel. Las vitaminas y las enzimas naturales que contiene la miel limpian y eliminan toxinas. Si la miel está muy espesa, déjala a temperatura ambiente unos minutos o caliéntala ligeramente para que se funda bien con el yogur.

Una vez que tengamos bien mezclados ambos ingredientes la guardamos en la nevera durante 20 minutos. La mascarilla fresquita será muy agradable para nuestra piel.

Cómo aplicar la mascarilla:

 

Pasado este tiempo, aplicamos la mascarilla sobre la cara con la ayuda de una espátula de madera. Para obtener los mejores beneficios es esencial limpiar la piel antes de aplicarla. Si la piel no está limpia, impide absorber correctamente los nutrientes de la mascarilla. Cuando vayas a extenderla, evita el contacto con los ojos y la piel de alrededor. Esta zona es muy sensible y, aunque trabajemos con ingredientes naturales, se puede irritar.

mascarilla facial casera después del sol

Esperamos en una postura horizontal 30 minutos. La relajación hará que la mascarilla surta más efecto. Evita estar pendiente del reloj con una alarma y cumple con el tiempo recomendado. A la hora de retirar la mascarilla, hazlo con agua fría, para que se cierren los poros, y movimientos suaves. Prepara una toalla limpia y seca suavemente.

Esta combinación nos ayudará a deshacernos de los efectos del sol que han dañado nuestra piel. Puedes guardar lo que sobre durante 4 días y repetir este proceso tres veces a la semana.