¿Rostro castigado por la mascarilla? Remedios caseros para combatir el acné

Tu seguridad y la de todos es lo más importante. Por eso, llevar siempre mascarilla y mantener la distancia de seguridad, son pasos clave para seguir las normas y cuidar de todos y entre todos. Recuerda colocarla de forma apropiada y solo tocar las gomas con las manos. Es posible que el calor, la humedad y el contacto continuo de la piel de nuestro rostro con la mascarilla, afecten a algunas pieles más sensibles. Exfoliantes y determinadas cremas, ayudarán a que la piel respire mejor. Si aun así te han salido granitos que antes no tenías, te ayudamos a combatirlos con remedios caseros.

1. Mascarilla de miel y canela:

 

La miel y la canela tienen propiedades antioxidantes y antibacterianas, por lo que pueden ser ingredientes muy útiles para combatir el acné. Además, la miel es un hidratante natural.

Haz una pasta con tres cucharaditas de miel y con una de canela. Mezcla bien y aplica la crema con la piel limpia y seca. Deja actuar de 10 a 15 minutos y retira con agua. Deja la piel respirar antes de aplicar la crema hidratante.

remedios caseros para el acne

2. Vitamina C del limón:

 

Si los granos ya son muy pronunciados, conviene secarlos antes de tratar la piel. Para ello el limón será tu gran aliado. Gracias a la vitamina C del limón, nuestro cutis conseguirá un componente astringente que ayuda a secar los granos.

Antes de ir a la cama, echa unas gotitas de limón en un algodón y da golpecitos en las zonas afectadas. Deja actuar toda la noche y por la mañana limpia tu cara con agua y jabón. El limón absorberá el exceso de grasa y ayudará a secar los granitos.

3. Aceite del árbol del té

 

Este aceite té se extrae de las hojas del árbol del té australiano. Entre sus propiedades destaca la capacidad por combatir las bacterias y reducir la inflamación de la piel. Este aceite es muy fuerte, lo comprobarás por el olor que desprende. Diluye el aceite con agua en un bote y úsalo de la misma forma que las gotas del limón. Aplica sobre un algodón y después en las zonas afectadas.

4. El poder de las hojas de aloe vera:

 

Las hojas de aloe vera tienen en su interior un gel transparente con grandes propiedades. Muchas cremas, geles, champús e infinidad de productos de cuidado del cuerpo están hechos con aloe vera. Si tienes aloe vera en casa, corta una hoja. Abre la hoja de forma vertical con la ayuda de un cuchillo y extrae el gel. Con la piel limpia y seca, extiende por la cara. Verás que se absorbe enseguida. Deja actuar toda la noche y retira con agua fría y jabón por la mañana.

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Esta opción es perfecta si tienes la piel muy seca. Sus activos hidratantes penetran en los poros y facilitan la eliminación de células muertas y sebo, al mismo tiempo que nutre el cutis.

5. Mascarilla de avena y leche:

 

La avena también tiene propiedades antioxidantes y antinflamatorias. La textura de los copos de avena ayuda a desprender las células muertas e impurezas de la piel para reducir los granitos. Para crear esta mascarilla natural necesitas dos cucharadas de copos de avena molida y media taza de leche fría. Remueve en un reciente hasta conseguir una pasta espesa. Lava el rostro y aplica de manera uniforme. Transcurridos 20 minutos, retira la mascarilla con agua fría.

Para estos tratamientos utilizamos ingredientes naturales y son menos propensos a generar una reacción no deseada en la piel. A pesar de ello, es recomendable probar primero en la mano para comprobar que nuestra piel tolera estas fórmulas. ¿Cuál de todas vas a elegir? No olvides la importancia de proteger tu salud y la de todos haciendo uso de tu mascarilla.