Seguramente hayas probado las algas en el sushi o en un ramen. Su uso va mucho más allá de las tendencias gastronómicas. Estas plantas marinas tienen alto valor nutricional, por lo que conviene integrarlas en nuestra dieta. Te contamos sus propiedades, las variedades más fáciles de encontrar y algunas formas de consumirlas.
Peculiaridades:
Las algas son depurativas y ayudan a eliminar las toxinas acumuladas en el organismo. Previenen la retención de líquidos y el estreñimiento, ya que son muy ricas en fibra. Otra de las propiedades más destacadas es su poder antiinflamatorio y antioxidante.
Además, contienen varios minerales, como calcio y yodo. El calcio ayuda a conseguir unos huesos fuertes y previene la osteoporosis y, junto con la vitamina D, ayuda a la absorción del mismo. Como puedes comprobar, un listado bastante completo.
Tipos de algas:
En casi todos los supermercados se presentan deshidratadas. También las puedes encontrar frescas, en conserva o en polvo. Las más comunes son:
Nori: Es la más popular, puesto que se usa para muchos tipos de sushi, como los makis. También es la que suelen llevar las sopas de los restaurantes asiáticos. En el supermercado la podrás ver en forma de láminas deshidratadas.
Wakame: Esta alga es muy común en ensaladas. Tiene un sabor suave, dulce y una textura carnosa que combina a la perfección con semillas de sésamo. Suelen ir aliñadas con vinagre de arroz y salsa de soja. En la cocina japonesa se utiliza mucho para hacer la sopa de miso.
Espirulina: Se comercializa en polvo o en cápsulas. La espirulina es antioxidante y es la favorita de los deportistas. Se suele tomar en batidos para favorecer la recuperación tras el ejercicio físico. Además, reduce el daño muscular.
Maneras diferentes de consumirlas:
El alga nori es la más fácil de encontrar en el supermercado. Por eso te contamos tres formas rápidas de consumirla de forma diferente al sushi.
Snacks de nori: con la ayuda de un pincel, pinta ambas caras del alga con aceite y tuesta vuelta y vuelta en una sartén. Necesitarás el fuego fuerte y tan sólo unos segundos. Añade semillas de sésamo y tendrás un snack crujiente, sano y original para añadir como topping a tus ensaladas o para tomar como aperitivo.
Dip de nori: tritura dos hojas grandes de nori y añádelas a un yogur griego. Agrega cebolleta picada muy fina y un toque de vinagre de arroz. Remueve todo y guarda en el frigorífico antes de “dippear” con zanahoria y pepino laminado.
Tofu arropado: macera barritas de tofu en una mezcla de salsa de soja, lima y agua durante un día. Saca las barritas de tofu y colócalas sobre varias láminas de nori, dejando espacio entre una barrita y otra hacer poder cortar y tener dos solapas de alga a ambos lados de la barrita. Corta con un cuchillo las algas, arropa las barritas de tofu, añade semillas de sésamo y ponlas en una bandeja de horno. Hornea durante 15 minutos a 180 grados y tendrás tus snacks de tofu y nori listos para degustar.
¿A qué esperas para introducir esta planta en tus menús?