Cría fama y échate a dormir. Eso es lo que le ha pasado al pobre aguacate (en otros países conocido como palta), al que se la ha colgado el ‘san benito’ de que es una fruta que engorda y ya no hay forma de quitárselo de encima. Es cierto que tiene una densidad calórica media-alta (aproximadamente 200kcal por 100g), por lo que hay que cuidar las cantidades, sin embargo, el aguacate es un alimento muy completo para los deportistas, rico en ácidos grasos insaturados y proteínas de alta calidad biológica, ideal para ganar masa muscular y conseguir una mejor definición.
En los días de duro entrenamiento, en los que se gastan muchas calorías, el aguacate es perfecto para reponer energía, estabiliza el ritmo cardíaco, favorece la recuperación y la construcción muscular, disminuye la inflamación de las articulaciones y ayuda a reparar los cartílagos.
Además, entre los múltiples beneficios del aguacate también veremos que tiene vitaminas para dar, vender y regalar, entre ellas Vitamina A, C, D, E, B-6, B-12 y K, también minerales y fibra dietética, protege el sistema inmunológico y mejora el sistema cognitivo y nervioso.
Y por si todo esto fuera poco, su alto contenido en Omega-3 es beneficioso no sólo para la buena circulación sanguínea y mejorar los niveles de colesterol, sino también para la vista y el buen funcionamiento del cerebro. Contiene múltiples antioxidantes que ayudan a atenuar y retrasar la aparición de arrugas en la piel. Y además, es un potente afrodisíaco, ¿qué más se le puede pedir?
La última moda entre los deportistas es tomarlo en batido, una forma muy sencilla y en la que el alimento conserva todos sus nutrientes para así poder aprovechar todos los beneficios del aguacate. De este modo y haciéndonos con uno de tamaño mediano (sin piel ni hueso) y añadiéndole leche, yogur natural, hielo y miel; todo licuado, logrearemos un batido espumoso, delicioso y sano.