El bienestar emocional es algo que los niños deben ir adquiriendo durante su infancia. Y queremos poner en valor su bienestar emocional como uno de los cuatro pilares fundamentales desde los que luchar contra la obesidad infantil. Por eso, es importante desarrollar algunas técnicas con las que fomentar las habilidades emocionales en los niños desde que son pequeños.
Las emociones básicas en los niños
Todos llevamos nuestra mochila emocional, que se abre a los 3 años de edad, momento en el empiezan a entrar los miedos, las inseguridades, las experiencias de vida.
Podemos afirmar que existen 6 emociones básicas:
- Puede ser más o menos positiva, y, por tanto, será más o menos agradable
- Alegría. Dentro de que es la emoción más agradable, no hay emociones positivas ni negativas. Las emociones solo nos traen una información valida que hay que reconocer y validar.
- Se asocia a comidas, a sabores, a olores… pero también hay situaciones que pueden generar asco.
- La tristeza trae consigo la paralización. Si hay depresión o tristeza, se comenzará a hacer cosas de manera diferente.
- La gestión del miedo puede llevar al pánico, y también conlleva una paralización.
- Hace llegar a la ira y la rabia. Si no se enseñan herramientas de gestión se puede convertir en un volcán emocional.
Hay que hacer caso de todas las emociones sean las que sean y darles su tiempo y su espacio.
Propuestas para ayudar al bienestar emocional
El bienestar emocional es un concepto amplio, que tiene que ver con la experiencia subjetiva de sentirse bien, en armonía y con tranquilidad.
Y aquí van algunas propuestas para lograr ese bienestar emocional.
- Realizar prácticas deportivas con regularidad. Y es que el ejercicio físico aporta grandes beneficios y ofrece la posibilidad de adquirir valores, habilidades y capacidades personales que mejoran la competencia social y al mismo tiempo favorecen el bienestar emocional.
- Compartir momentos familiares como excursiones, paseos, una tarde de cine, lectura o juegos. Establecer vínculos positivos con los niños y niñas ayuda a crear lazos afectivos. Sentirse bien en su entorno más cercano favorece el bienestar personal.
- Fortalecer la empatía. Esta habilidad es un elemento fundamental para la resolución de conflictos, la comprensión y la vinculación son los demás. Podemos afirmar que la empatía es un elemento esencial en la creación de vínculos positivos.
- Mostrar cariño. Besos, abrazos, gestos de aprobación, de apoyo. Sentir el cariño de los otros refuerza el bienestar emocional.
- Hablar de sentimientos. Ayudar a los niños y niñas a poner palabras a aquello que les esta pasando. Enseñarles a entender sus emociones y a gestionarlas.
- Establecer límites. Los limites dan seguridad y aceptar un “no” es signo de consciencia emocional.
- Generar confianza. Crear ambientes cómodos, cercanos y generar confianza a los niños y niñas facilita la verbalización de sentimientos. Favorece la explicación de problemas, de preocupaciones o de dudas.
- Enseñarles a ser positivos. Es importante saber buscar alternativas, no caer en el pesimismo y poder tener recursos.
- Adquirir la capacidad de ser resilientes, para recuperarse ante situaciones adversas o traumáticas.
- Preparar a los niños y las niñas hacia el camino de la vida. Autonomía, conocimiento, confianza son características que facilitan la autonomía emocional.
Las familias juegan un papel fundamental en el bienestar emocional de los niños y las niñas y, por tanto, es su responsabilidad el permanecer alerta ante las posibles necesidades que puedan surgir de los pequeños en casa.