El Día de San Valentín es una festividad que está rodeada de controversia. Hay quienes piensan que es una iniciativa sin fundamento. Pero también hay mucha gente que cree que el 14 de febrero es el día del amor por excelencia y lo aprovecha para tener un detalle con su enamorado/a. A estos últimos va dirigido este texto. Y a los incrédulos, por qué no, también.
Celebrar San Valentín no tiene porqué ser sinónimo de gastar mucho dinero en el restaurante más cool o comprando la mejor joya o reloj de la tienda. Se puede celebrar San Valentín en casa, gastando lo justo y hasta en familia. Tan sólo se necesita imaginación y dedicarle un poco de tiempo.
Puedes empezar por decorar la casa con unas velas aromáticas, unas notitas románticas por las paredes. Quizá unos dibujos que te hayan podido ayudar a hacer los niños, así les haces partícipe de la celebración; música romántica, adornos de color rojo y hasta decorar el rollo de papel higiénico con corazones. ¡Imaginación, originalidad y un toque de humor!
Cocina con imaginación y mucho cariño
También te proponemos preparar una cena romántica especial para la ocasión. Igualmente puedes involucrar a los niños en esta parte de la celebración. Podéis ir a hacer la compra juntos y preparar un menú diferente: tipo picnic casero para cenar en el suelo con una alfombra y unos cojines. Un menú temático también es buena opción, haciendo referencia a vuestra película favorita o a la ciudad donde comenzó vuestra historia.
No hace falta que sea el menú de un Chef profesional, seguro que la otra persona sabrá apreciar tu esfuerzo y buena intención aunque sea una cena sencilla acompañada de una copa de vino. También podéis darle un poco de chispa a la ocasión y añadir algún alimento afrodisíaco, como unas ostras para empezar o un ‘primer postre’ con canela.
Un regalo especial sin gastarte el sueldo
Y por último, puedes preparar un regalo especial sin tener que gastarte todo el sueldo. Por ejemplo un álbum con fotos del último viaje, de momentos importantes de vuestra vida juntos o, si se te dan bien, hacer alguna manualidad o pintura. Una opción que da mucho juego es hacer una cesta o baúl ‘de 5 los sentidos’ y llenarla con un pequeño detalle por cada uno de los sentidos. Bombones de chocolate para el gusto, un frasquito de perfume para el olfato, una camiseta suave para el tacto, una foto tuya para la vista y un cd con vuestras canciones favoritas para el oído son sólo algunas propuestas.
Y para pasar a un siguiente nivel, puedes preparar un lujoso baño en casa para disfrutarlo juntos. Llena la bañera de agua y espuma de baño, pon unas velas aromáticas cerca, baja la intensidad de la luz y que nada ni nadie os moleste. ¡Feliz Día de San Valentín!