La Denominación de Origen Protegida “Cereza del Jerte” corresponde a las que se cultivan en el Valle del Jerte, situado en el norte de Extremadura. Gracias a las singulares características de la zona, su calidad es excepcional y de ahí la fama que atesoran. Hoy os invitamos a conocer un poco más acerca de estas celebrities del mundo cerecil.
Dentro de las conocidas como cerezas del Jerte encontramos distintas variedades de cerezas, dentro de las cuales también se sitúan las populares picotas.
Variedades de cerezas
No todas las cerezas son picotas, pero sí todas las picotas son cerezas. Las cerezas con Denominación de Origen del Jerte se dividen en dos grupos: con pedúnculo (al recolectarlas el rabito se queda prendido del árbol) y sin él, que son las picotas. Entre las que conservan el pedúnculo encontramos las Navalinda, Buriat y Van, que son de color rojo y, generalmente, más pequeñas que las que no tienen rabo. Los tipos de picotas más comunes son Ambrunes, Pico Negro, Pico Limón Negro y Pico Colorado, su color es granate oscuro tirando a vino y son más dulces que las anteriores.
El Valle del Jerte
El Valle del Jerte se asocia con dos fechas del año: La primavera, cuando los más de un millar de cerezos florecen y todo el valle se cubre de blanco, momento en el que recibe multitud de visitantes que llegan para disfrutar del espectacular paisaje que solo dura unos días. La otra época es en verano, durante la recolección de sus codiciadas cerezas. Durante ese momento se respira en el ambiente una frenética actividad. Aunque no nos engañemos, cualquier estación del año es buena para visitar el Valle del Jerte y disfrutar de la gastronomía extremeña.
Se cree que las cerezas fueron introducidas en el Valle del Jerte por los árabes y su adaptación a la zona fue sorprendentemente rápida y positiva. La singularidad climática, geológica y biológica de la región, un valle rodeado de montañas, de tierra arenosa y gran afluencia fluvial, hacen que las cerezas de del Valle del Jerte sean de una calidad superior, lo que se suma a los beneficios propios de las cerezas. Ya en el siglo IX el Valle del Jerte era conocido por sus deliciosas cerezas, reclamadas en la Corte. Un cultivo que, hoy en día, es el principal motor económico de la comarca.
Más de un millón de cerezos los que Florecen
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