Comenzamos la temporada en la que nuestra nevera se viste de verde. Es el turno de las alcachofas, las acelgas, las espinacas, las endibias o los aguacates. Y abril es el mejor momento de estos últimos, los aguacates.
Cuantas veces hemos comprado esta fruta para preparar un rico guacamole o una ensalada y al abrirlos por la mitad nos damos cuenta de que nos cuesta un poco porque aún están muy verdes. Nuestro gozo en un pozo, tendremos que esperar unos días para disfrutar de su máximo sabor. O todo lo contrario, de repente está marrón por dentro y con todo nuestro dolor tenemos que desecharlo y cambiar nuestro menú. Con los aguacates se necesita un poco de experiencia para conocerlos. Si aún no la tienes y quieres degustar tus recetas con aguacate cuando elijas, anota las claves para elegir los mejores aguacates.
Tres trucos para elegir el aguacate ideal:
Primero nos fijaremos en el color. Hay que tener en cuenta la variedad de aguacate del supermercado. Nos centraremos en los de aguacates con la piel rugosa y tirando a negra, el Hass. Si la piel de nuestro aguacate está muy verde, significará que aún le faltan unos días por madurar. Si está muy negra es posible que solo puedas comerlo ese mismo día o ya esté pasado. Lo ideal es que la piel esté entre verde y marrón. Si estás ante otra variedad de aguacate como la Pinkerton o Fuerte, deberás fijarte en otras tonalidades, ya que su piel es siempre más verde.
Una vez que hayamos visualizado los mejores, pasaremos a fiarnos de nuestro tacto. Al tocar el aguacate (siempre con guantes) debe estar blando, sin que lleguen a hundirse las yemas de nuestros dedos. Tampoco se ha de ahuecar la piel. Si ya has comprobado estas dos claves, solo nos falta un dato para saber que estamos ante el aguacate perfecto.
El último paso, y el más fiable, será desprender la punta o botón de nuestro aguacate. Si el color del fruto es amarillo tirando a verde, ¡está perfecto! Su textura será mantecosa y estará lista para degustarla.
Claves para que el aguacate madure:
Si compras los aguacates, pero no piensas usarlos al momento, cómpralos algo firmes y duros. Podrán madurar a temperatura ambiente en unos cinco días. Si no había aguacates maduros y lo que quieres es acelerar el proceso de maduración prueba a hacer lo que te proponemos. Envuelve el aguacate en papel de periódico y colócalo junto a frutas que maduran rápidamente, como las manzanas o los plátanos. Podrás comprobar que en uno o dos días los tendrás listos para consumir.
Ahora que ya sabes cómo encontrar el aguacate perfecto, solo te queda disfrutar de las múltiples recetas que hay con aguacate y de sus beneficios y energía. ¡Buen apetito!