La temporada óptima de endivias (o endibias) empieza en los meses de otoño. Es una hortaliza de invierno de hojas blancas y apretadas. Existen tres variedades de endivia: endivia común, endivia rizada y la escarola. En este post, nos referiremos a la endivia común (pequeño cogollo de hojas blancas), también conocida como francesa o belga. ¿Alguna vez has probado las endivias hervidas y gratinadas?
Endivias en la cultura belga:
Las endivias frescas o crudas, es la forma más habitual de comerlas en nuestro país. En Bélgica, es muy común verlas hervidas y gratinadas, cocinas como “chicons au gratin”. Esta versión de endivias hervidas es la que te traemos hoy, para que aprendas otra forma de comer la raíz de la achicoria y saques el máximo partido a los alimentos de temporada.
Para la receta de endivias gratinadas con bechamel, elige cuatro endivias de calidad, mantequilla, harina, queso y… ¡manos a la obra! El amargor de la endivia quedará suavizado con la bechamel, el queso y el toque gratinado final.
Cómo hervir las endivias:
Las endivias se caracterizan por su sabor amargo. Te damos algunos trucos para reducir ese amargor y que se conserven enteras una vez que se han cocido. Corta la otra parte de abajo del tallo y quita el cono central haciendo un círculo con la ayuda de un cuchillo de punta fina.
Después, pon tres palillos alrededor de la endivia, para que se conserve entera en la cocción. Cuando el agua esté hirviendo, añade sal y cuécelas durante 15 minutos. Reserva parte del agua de cocción para enriquecer la bechamel que haremos después. Escurre el agua y aprieta un poquito cada endivia para que no quede dentro. Gracias a los palillos las endivias estarán enteras.
Prepara la bechamel casera:
En una sartén, derrite la mantequilla y añade la harina. Remueve con una espátula hasta que la harina quede totalmente fundida con la mantequilla. Después, añade poco a poco la leche y alterna con el agua de cocción que retiramos previamente. Añade pimienta molida, sal y nuez moscada. Remueve hasta que consigas una textura homogénea. Puedes añadir un quesito para obtener más cremosidad en tu salsa.
Gratina al horno, el toque final:
Coloca las cuatro endivias en un recipiente apto para horno. Cubre con la bechamel y añade queso rallado. El queso emmental es idóneo para esta receta belga, pero puedes hacerlo con otro queso apto para fundir. Cuando veas que la parte de arriba está gratinada, dorada y crujiente, retira del horno y sirve.
Si te gusta el queso, las recetas gratinadas y comer de temporada, sin duda este será uno de tus platos estrella del otoño.
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