Antiguamente había mujeres que se echaban una gota de limón en cada ojo para blanquearlos, hay quien toma su zumo por las mañanas o con miel para curar el resfriado… Sabemos que el limón tiene múltiples beneficios para nuestra salud pero, ¿los conocemos todos?
No pueden faltar los limones en nuestra nevera. Ya sea para tomarlos en zumo o para acompañar las ensaladas o marinar pescados y carnes, el limón es un magnífico aliado para nuestra salud. Su consumo no debe limitarse a ocasiones puntuales, por sus múltiples propiedades y beneficios, es aconsejable que lo incluyamos en nuestra dieta diaria.
El limón como remedio medicinal
Es conocido por su alto contenido en vitamina C (al igual que el kiwi) pero también nos ofrece vitaminas P y del grupo B. Además de minerales como potasio, fósforo, magnesio, calcio, sodio, hierro y flúor. Apenas tiene fructosa y nada de grasa, por lo que su aporte calórico es muy bajo, ideal en las dietas de adelgazamiento.
Tiene propiedades antibióticas, depurativas y bactericidas. Nos ayuda a superar los procesos catarrales y gripales, también la amigdalitis, ronquera, pulmonía, asma… En estos casos, la miel y el jengibre son buenos compañeros del zumo de limón. Si lo tomamos recién levantados, en ayunas, cumple una función depurativa muy importante, activando el tracto intestinal y favoreciendo su limpieza y desinfección.
Los médicos han empezado a recomendarlo en dietas para enfermos de cáncer por sus cualidades antitumorales y antioxidantes. Si bebemos su zumo sin endulzar, tiene un efecto alcalinizante que equilibra el exceso de ácidos de nuestra dieta, lo cual, además, regula nuestro PH de la piel. Por la noche, antes de acostarnos, mezclado con aceite de oliva virgen extra (AOVE), nos sirve para desintoxicar y eliminar cálculos en el hígado y en la vesícula.
Mejora los síntomas de problemas oculares como la retinopatía diabética, reduce los niveles de azúcar en sangre y alivia las molestias de las alergias. Si utilizamos la ralladura de la piel del limón (en ensaladas, postres, sopas, etc.) estaremos ayudando a prevenir el Parkinson y otros trastornos del cerebro y del sistema nervioso. Por último, es un magnífico desinfectante para las heridas ya sea ingerido o aplicado directamente sobre ella.