Tener una buena sartén y un estupendo juego de cacerolas es el sueño de cualquier amante de la cocina. Por ello, cuidarlos es una ardua labor que no debes dejar de lado si pasas mucho tiempo entre fogones. Pero, por mucho que lo hagas, la realidad es que el uso frecuente hace que vayan perdiendo todas sus propiedades, haciendo que los alimentos se adhieran y provocando que cada vez sea más difícil su limpieza.
Aquí te vamos a desvelar algunos de los trucos más utilizados para mantener tus sartenes y cacerolas como el primer día.
Antes de empezar, nunca laves con agua fría tu sartén si todavía está caliente. Si lo haces, correrás el riesgo de que las propiedades antiadherentes se vayan perdiendo. Otra cosa a evitar es lavar la sartén con el estropajo de la esponja, porque lo que harás es rayar la superficie. Como consecuencia la comida comenzará a pegarse en su superficie, haciendo cada vez más difícil su limpieza.
Trucos para lavar tus sartenes y cacerolas
En el día a día de tu hogar se cocina y se mancha sin apenas darte cuenta, hasta que llega ese momento en el que observas atónito como la base de la sartén ha adquirido un cierto aspecto vintage. No se trata de otra cosa más que de grasa y suciedad acumulada que hay que retirar. Bien, pues ha llegado el momento de lavar las sartenes y cacerolas correctamente.
A continuación te explicamos 5 trucos para aplicar cuando tu sartén o cacerola presente restos de alimentos quemados o difíciles de quitar, así como para alargar la capacidad antiadherente de la misma:
- El bicarbonato: Si la grasa está muy pegada o, incluso, encuentras restos de alimentos quemados, lo que puedes hacer es llenar la sartén de agua caliente y dejar que hierva a fuego fuerte durante unos cinco minutos. Lograrás ablandar la suciedad y la grasa permitiendo una limpieza más sencilla. Una vez retirado del fuego, ya puedes limpiar los residuos restantes siempre con la parte suave de la esponja. Agrega ahora 2 cucharadas de bicarbonato con media taza de vinagre y déjalo hervir unos 10 minutos. Una vez enfriado, retira el agua y limpia con normalidad. Observarás como la suciedad habrá desaparecido.
- El vinagre: Llena con agua la superficie que quieres limpiar y vierte media taza de vinagre blanco. Déjalo hervir durante algunos minutos y retira del fuego. A continuación, friega la cacerola y verás como la suciedad desaparece como por arte de magia.
- Suavizante de la ropa: Si lo que te encuentras son alimentos pegados y difíciles de quitar, puedes hacer uso del suavizante de la ropa. Vierte un poco en la sartén junto con agua tibia y déjalo durante unas 2 horas. Después enjuaga y lava como de costumbre. Verás que los restos se habrán ablandado lo suficiente.
- La sal: Otro truco para evitar que los alimentos se peguen a la sartén será el de colocarla en el fuego, esperar un poco a que se caliente y añadir una cucharada de sal. Espera nuevamente a que la sal se oscurezca, momento en el que apagarás el fuego. Ahora limpia con un paño seco. Es un pequeño truco que hará que los alimentos no se peguen en tu sartén.
Limpieza de las sartenes según el material del que estén hechas
¿Estos trucos me servirán para cualquier tipo de utensilio sin importar el material del que esté hecho? En la actualidad la innovación tecnológica ha creado nuevos materiales ultrarresistentes, más duraderos, y más fáciles de limpiar, pero que requieren también de un mantenimiento para conservarlas por más tiempo.
Limpiar sartenes de teflón
Antes que nada, deberás emplear una espátula de madera para cocinar sobre este tipo de material y alargarás así la capacidad antiadherente de tus utensilios.
Por otro lado, utiliza papel de cocina o la propia espátula para quitar los restos de comida. Lava siempre la sartén con un estropajo suave y, finalmente, sécalo con papel para guardarlo hasta su siguiente uso.
Limpiar sartenes de acero inoxidable
No utilices esponjas de acero o cobre ya que rayarán la superficie de la sartén, haciendo perder su poder antiadherente.
Las marcas de quemadura en los utensilios de acero inoxidable, como los cuchillos, pueden limpiarse con bicarbonato. Espolvorea una cantidad de bicarbonato de sodio sobre la superficie de la sartén o el cuchillo y frota con un paño seco.
Otra de las cosas a evitar con este material es la utilización de detergente, así como el lavado en el lavavajillas para que la superficie antiadherente dure por más tiempo. Y sécalos siempre con papel de cocina.
Limpiar sartenes de cerámica
Se trata de un material muy resistente, con lo que la vida útil de la sartén se alargará en este último caso si tenemos un mantenimiento adecuado.
Se pueden lavar de una manera convencional con un poco de agua tibia, poco detergente y una esponja, siempre suave.
Con los aperos de la cocina como nuevos ya puedes preparar esos platos tan deliciosos y que tanto gustan en casa. ¿Tienes algún otro truco para limpiar tus sartenes y cacerolas? ¡Cuéntanoslo!
Gracias,!!