Se podría decir que lleva toda la vida con nosotros, no obstante su cultivo data de antes del año 2000 a.C., pero con todo y con eso las múltiples propiedades y beneficios de la berenjena aún siguen siendo un misterio para algunos. Hoy nos proponemos acercarte un poco más este riquísimo fruto, procedente de la planta del mismo nombre, y animarte a que le hagas un hueco en tu cesta de la compra, en tu cocina y, sobre todo, en tu alimentación.
Aunque existen pruebas documentales que sitúan su origen cerca del sudeste asiático, la berenjena llegó a Europa por la España musulmana. Desde allí, su cultivo fue extendiéndose por los países de la cuenca mediterránea y más tarde, afortunadamente, por nuestras mesas.
Nuestra protagonista es un fruto comestible, de tipo baya y de entre 5 y 30 centímetros de longitud. Su piel debe ser lisa y brillante, con colores diversos según la variedad y que van desde el negro al blanco, pasando por el púrpura, el amarillo o el rojo. En su interior encontraremos una pulpa consistente y de textura esponjosa, con pequeñas semillas amarillentas y un sabor en el que rápidamente localizaréis notas amargas.
Una vez que os hayáis llevado a casa vuestro cargamento de berenjenas, nuestra recomendación es que las conservéis en la nevera hasta su consumo, que deberá ser lo antes posible ya que se trata de un fruto que raras veces resiste más de 10 días. Además y según pasa el tiempo, empieza a amargar y desarrolla unas desagradables manchas pardas.
La berenjena y sus propiedades
En comparación con otros frutos, verduras u hortalizas, nuestra amiga la berenjena tiene un valor energético y nutricional pequeño. Precisamente por estar libre de grasas, aportar muy pocas calorías y ser el agua el componente mayoritario de su peso –más del 90 por ciento de su composición-, la berenjena es un alimento muy valorado en la búsqueda de una dieta equilibrada.
Además, si tenemos en cuenta que se trata de un alimento con efecto saciante y que actúa como un excelente diurético, veremos fácilmente en la berenjena a un magnífico aliado contra esos kilillos de más que nos hemos traído de regalo tras las vacaciones de verano.
Pero las propiedades y beneficios de la berenjena no se quedan ahí, porque son además una buena ayuda a la hora de eliminar el colesterol, eliminan toxinas, tienen propiedades antioxidantes gracias a su aporte de Vitamina E y antocianina, cuentan también con ácido fólico tremendamente beneficioso para nuestros huesos y, además, ayuda a prevenir la ateroesclerosis.
Como veis, los beneficios de la berenjena van mucho más allá de estar riquísimas y quedar de vicio gratinadas al horno con queso, rellenas de carne o en cualquiera de sus múltiples presentaciones. De hecho, os invitamos a que nos digáis en los comentarios cuál es vuestra receta preferida con berenjena. ¿Cómo te gustan más a ti?
Fuentes: MejorconSalud