Algo tan delicioso como las torrijas no debería reservarse solo para Semana Santa. Ya las vemos en los escaparates de algunas pastelerías durante todo el año. Aprovechamos esta festividad para dejarte algunos trucos para conseguir unas torrijas de 10 cualquier día del año.
Ingredientes para tus torrijas:
Sabemos que existe pan para elaborar torrijas. Es una buena opción cuando nos entra el antojo de comerlas de un día para otro. Pero lo ideal es hacerlo con pan del día anterior. Es la excusa perfecta para no desperdiciar alimentos.
Hay muchos tipos de torrijas: de vino, con miel, con zumo… Esta vez nos quedamos con las clásicas torrijas de leche. Por lo tanto, además del pan necesitarás leche. Te recomendamos que la leche sea fresca, para que aporte todo su sabor. Si no puedes tomar lácteos la leche de coco será una buena elección. Para aromatizar la leche prepara un limón y canela en rama.
También utilizarás huevos, aceite y, para el rebozado final, canela y azúcar. Podremos sustituir el azúcar por la panela, que es azúcar no refinada, y dar un toque más saludable. Lo dejamos a elección de cada uno.
Tiempos que recomendamos:
Para hacer unas torrijas de 10, necesitarás tres días. No te asustes, tan sólo serán unos minutos de esos tres días.
Como te decíamos, lo ideal es que el pan sea del día interior, así que tus torrijas ya han requerido un día de preparación. Cuando el pan esté duro, haz rebanas de dos dedos de grosor. Para preparar la leche necesitaremos calentar (sin que llegue a hervir) la ralladura de medio limón y una barrita de canela en rama. Espera a que alcance temperatura ambiente y baña las rebanas de pan: tienen que empaparse enteras, pero sin llegar a romperse.
Cuando estén todas las piezas impregnadas en leche resérvalas en un plato y guarda en la nevera durante la noche. Al día siguiente, ya vamos por el tercer día, puedes rebozarlas. Para ello bate un huevo (o dos o tres, depende de la cantidad que quieras hacer) y rebózalas.
A continuación, prepara una sartén con aceite limpio y cuando esté caliente añade las torrijas. Cuando estén doradas por la parte de abajo, dales la vuelta una a una. Mientras, puedes preparar un plato con la mezcla de canela en polvo y azúcar (o panela). Saca las torrijas y déjalas unos segundos en una fuente con papel absorbente, para retirar los restos de aceite. Ahora ya puedes rebozarlas en la mezcla que has preparado antes.
Nuestra recomendación es comerlas nada más hacerlas: estarán crujientes y calentitas. ¡Pero ojo, retira el plato antes de que caigan todas! Las torrijas aguantan hasta tres días y siguen estando muy, muy ricas.
Somos unos auténticos fans de este dulce. ¡Comparte con nosotros más trucos!