Ya estamos en plenas vacaciones escolares y se plantea el gran dilema: ¿dónde llevamos a los niños de vacaciones? No es fácil, pero poniéndole un poco de imaginación puedes encontrar destinos en los que pequeños y mayores disfrutaréis de estos días libres. Campo o playa, ¡elige! Te damos algunas originales ideas para viajar con niños.
Un verano sin playa, no es verano
Si no queréis renunciar a la playa, existen destinos de costa con actividades en las cercanías muy atractivas para los más pequeños. En Girona, concretamente en Cadaqués, podréis disfrutar de días en la playa, que siempre son un éxito seguro con los niños, con la “Ruta de los piratas de Cadaqués”. Se trata de conocer la historia del lugar jugando a ser piratas en busca de un tesoro. La búsqueda os llevará andando por la costa hasta una cueva y volveréis ¡en barco!
La belleza de las playas del norte de España es indudable; ahora, meterse al agua es solo para valientes. Para los que preferís las playas de Vizcaya o Santander, os recomendamos hacer una excursión de un día a Karpinabentura. Hablamos de un parque natural que acoge a animales silvestres que, por distintos motivos, no pueden vivir en su medio natural, es decir, que provienen de la caza o tráfico ilegal. Son mascotas abandonadas, animales nacidos en cautividad o que provienen de granjas cerradas. Además de visitar a los animales y pasar un día en la naturaleza, los niños aprenderán sobre sensibilización ambiental.
El interior también es atractivo
Para desconectar de verdad de nuestra actividad habitual, no hay nada mejor como pasar unos días en plena naturaleza, alejados de móviles, TV u ordenadores, viviendo en auténticas cabañas. A los niños les fascinará la idea de hacer ecoturismo. Podéis encontrar alojamientos en cabañas en el Valle del Tietar en Ávila o en el Parque Nacional de Cabañeros en Ciudad Real, entre otros muchos lugares.
Después de los piratas, ¿qué es lo que más llama la atención de los niños? ¡Los dinosaurios! Hace muchos, muchos años estos enormes animales habitaron lo que hoy en día es La Rioja. Alrededor de los restos que se han ido encontrando se ha montado un parque de paleoaventura, el Barranco Perdido, que recrea la época de los dinosaurios. Se puede participar en actividades paleontológicas en las excavaciones y en el laboratorio. Otro día, podéis visitar alguna de las bodegas para que os muestren cómo se elabora el vino. Y al terminar la jornada, no dejéis de disfrutar en cualquiera de los pueblos cercanos de la gastronomía y del vino de La Rioja.
A pesar de todo lo anterior, éstas son solo algunas ideas, destinos originales para niños hay infinitos (piscinas naturales, granjas, parques temáticos, acuarios…). Solo tienes que ponerle un poco de imaginación para salir de la rutina.